viernes, 27 de abril de 2012

Ser

¿Y si nos alejamos y si nos perdemos? ¿Si nos encontramos?¿Si nos buscamos?
¿Si dejamos todo para después y si en realidad es hoy?
Hoy hay viento, estás vos. 
Si me sopla, me soplas, me abrazas y me hundes. 
Tu perfume te personifica aún cuando en la cama acurrucado estás espantando lo que te atenta.
Pero estás
vivo,
estás siempre. 
Te respiro para que te quedes más de lo idealizado.
No sueño, aunque sabes que sí,
y hoy soy lo que eres cuando no somos, pero seremos, cuando retomemos nuestro rumbo como siempre;
aunque aún crea que sea todo un engaño
corazón.

martes, 24 de abril de 2012

Cartas de ella al interior para: el que tiene nombre y es.

Mi vida ha ido y ha venido.. Sin quedar todo recordado esos momentos queman cuando el miedo entra en esta habitación y me recuerda que debo tomar una decisión.
Maldito corazón, quiero saber qué es lo que buscas, no entiendo si es la cabeza la que finalmente está por decidir.
Sé, no quiero. Sin embargo, estoy cansada de ir siempre por lo mismo, quiero, cambie en mi vida, quiero, sea un día memorable, sin importar el final ni el desenlace.
Pero tengo miedo. No sé, si es lo que quiero, pero arriesgarme, aún si al instante deba decir que no.
Solo, espero todo aquello que vi, al comenzar, lo que sentí vuelva a nacer.
No sé que pasa conmigo, ya no estoy igual. Excusa, no sé; pero no sabes cuanto me esfuerzo por ello.

lunes, 23 de abril de 2012

Ya me puedo ir


Hacia mucho había pensado en este lugar, en cuanto quería regresar y los tantos recuerdos que yacen en él.
Así en lo que asumí seria mi último resurgir de fuerzas, decidí regresar a mi santuario, a mi paraíso personal.
El cielo pintado de azul y rosa por un sol que ya iluminaba, pero aun no había salido, yacía sobre, mientras yo, recostado en el pasto húmedo lo veía, y pensaba,  tantas veces este cielo me ha acompañado.

Tantas veces me había recostado en este mismo lugar a admirar toda su belleza y basta infinidad sin más a mí alrededor que el vuelo de los mirlos y el canto de los ruiseñores.

Con los ojos cerrados, no puedo hacer más que recordar.

Recordad una infancia llena de aventuras en selvas fantásticas y planetas del espacio exterior, tantos momentos, todos en este mismo lugar, y cuando fui creciendo simplemente, ver el cielo y pensar en su lejanía.

Todo siempre recostado en el pasto que pretendo sea ahora mi lugar de partida. Tantos momentos, hoy parecen tan lejanos, mis juegos, mis pensamientos, nuestro primer beso.

En esa ocasión era el cielo nocturno quien estaba de mi lado, y todas las estrellas, desde su brillante lejanía, habían ido a espiarnos, simplemente hablábamos,  nos divertíamos, mientras fingíamos que nada pasaría, hasta que entre risas nos quedamos en silencio, y bueno, ya nada mas podía yo hacer.

Me duele tanto pensar que debo dejarte, y en que ya no podré hacerte feliz nuevamente, y es ese el único remordimiento que llevo, espero que te consuele saber que es en este lugar donde me fui y que te esperaré ansioso desde el otro lado, pero por sobre todo, que hasta el último instante, yo te amé.

El sol se hace presente y golpea mi cara y pecho.

Abro los ojos y lo veo.

El cielo azul, majestuoso, lo fue antes, y lo será después de mí.

Verlo, solo acompañado del vuelo de los mirlos y el canto de los ruiseñores, hoy es más hermoso que nunca.

No puedo pensar una mejor forma de irme.


Escrito por: Manuel Geraldo

lunes, 9 de abril de 2012

Las afirmaciones de hoy, las dudas de siempre

Tu aroma todavía en mi mano.
¿Tu aroma todavía en mi mano?
Esperamos lo acordado y lo pactado.
¿Esperamos lo acordado y lo pactado?
Fuimos madurando como aquel fruto verde;
madurando el amor.
¿Fuimos madurando como aquel fruto verde;
madurando el amor?
Hoy respiro
¿Hoy respiro?
Vivimos en ese tiempo paralelo
en el que sintonizamos nuestras vidas.
¿Vivimos en ese tiempo paralelo
en el que sintonizamos nuestras vidas?
Nuestro tiempo.
¿Nuestro tiempo?
Ya estoy entre tu corazón y tu alma.
¿Ya estoy entre tu corazón y tu alma?
Estás entre mi corazón y mi alma.
¿Estás entre mi corazón y mi alma?
Mi vida.
¿Mi vida?
Ya solo queda esperar
el momento en el que comencemos a vivirnos mutuamente.
¿Ya solo queda esperar
el momento en el que comencemos a vivirnos mutuamente...?